El cine
venezolano y yo tenemos un acuerdo, yo veo cuanta película me da la gana de
diferentes estilos de muchos países con culturas que contribuyen a mi construcción
cinéfila (Necesito empezar esta reseña de la manera más pretenciosa para
sentirme feliz sobre mi mismo) y cuando me empieza a carcomer la culpa
nacionalista, decido darle una oportunidad a una película venezolana. Y como había
escuchado cosas muy buenas de la película Piedra, Papel o Tijera (Que
evite ver por lo estúpido del título) sabía que no podía vivir en paz hasta
verla (En serio, mi culpa nacional es grande, está bien, basta de los paréntesis).
Y una vez que la he visto puedo decir que esta película es una tragedia, lo
cual por extraño que suene, no es algo malo. Permítanme explicarme,
recientemente y por muchas fuentes de videos, reseñas, artículos, la mayoría
por personas no profesionales en la materia, me llevaron a fascinarme con el
tema de la tragedia, siendo esta, esencialmente, una historia con un destino
deprimente. La razón por la cual me fascina este tipo de historia es porque
muchos medios de ficción creen que solo por agregar un final triste o
perturbador eventualmente han hecho una tragedia y en consecuencia han
establecido un punto trascendental cuando en realidad solo han creado una serie
de eventos innecesariamente desagradables que agregan pretensión en lugar de
profundidad ¿De verdad necesito decir ejemplos? El punto es que una buena
tragedia es más que un final deprimente, es un camino de tensión y desesperación,
una visita a los mayores defectos humanos y las consecuencias extremas de esos
defectos. Así como está mal poner un final feliz y fácil a una historia que
claramente debió terminar de otra manera, también es incorrecto colocar un
final triste solo porque si, si quieres una tragedia, entiende los principios
de la tragedia, Pierda, Papel o Tijera entiende los principios de la
tragedia.
Verán, todo
se trata de tener una historia bien construida y que gire en torno a un punto.
Por ejemplo, Romeo y Julieta trata sobre dos muchachos que se enamoran
y mueren, pero es algo más complejo que eso. El punto de Romeo y Julieta
trata sobre como a veces el amor es ingenuo y que esa misma ingenuidad es
peligrosa, no son solo muchachos que terminan suicidándose, empatizamos con su
punto de vista aun si no estamos de acuerdo con sus acciones, luego el escritor
explota su defectos de ingenuidad y hasta su orgullo y los coloca en una situación
en la cual sus defectos terminan perjudicándolos hasta que no queda otro fin
posible mas que un final deprimente. Eso es tragedia, hay un punto, hay empatía,
hay errores y todo lleva a una conclusión que aunque deprimente se siente
adecuada para la historia. Piedra, Papel o Tijera hace esto en un modo
poético, por lo menos en mi opinión. La historia del filme tiene un punto,
tiene personajes con los que podemos empatizar aun si no coincidimos con sus
acciones, como ya mencione, también se encuentran con una situación que hace
aflorar sus mayores defectos y esos defectos los llevan de una manera que casi
se puede describir como karma, a un trágico final que se siente inevitable, en
mitad de la película no sabemos cómo va a terminar la historia pero sabemos que
no bien. Tenemos unas personas ordinarias, estables, incluso simpáticas al
principio del filme y al final, solo podemos pensar en lo que hubiera sido si
ese pequeño hecho no hubiese ocurrido, si la chispa de la casualidad no hubiese
encendido la llama de la tragedia.
El dialogo
de la película se siente autentico, las situaciones reales, me creí lo que salía
de las bocas de estos personajes y cuando termino el filme y tuve que meditar
en su mensaje, sentí que vi un gran filme. Pero una buena historia no salva
todos los problemas de la película, especialmente el tono del filme. La mayoría
de las veces la tensión te sientes y estas interesados, otras veces el montaje
es sobre usado y termina dando un aire de pretensión que realmente distrae y
peor aburre, el principio especialmente es difícil de pasar. La cinematografía
es buena, con estupendo uso de edición en varias partes pero nunca un momento
espectacular y algunas tomas simplemente fallan y no transmite el tono personal
que se debería estar sintiendo, pero para ser justo el filme se siente
suficientemente realista y el uso de la cinematografía aunque limitado, cuando
se luce, realmente se luce, aun si la toma no es deslumbrante. Y esos pequeños
momentos de pretensión y de aburrimiento son perdonables para lo que el filme
ofrece, lo que no es perdonable son las actuaciones: hay personajes secundarios
que simplemente sobreactúan y no se sienten reales, distraen de la situación,
lo bueno es que la película se salva es porque el reparto principal en esencia
es bueno y aun cuando algunas actuaciones no son muy fantásticas, son creíbles,
especialmente por el tono del filme y el dialogo que hablan. Muchos encontraran
que la película se vale mucho de coincidencias y, aunque es cierto, yo insisto
en que esto solo resalta en tema de causa-efecto del filme y como lo que pudo
ser diferente pudo haber evitado una tragedia. Y aunque el filme fuerza un poco
a la historia para que sus personajes actúan de una manera que parece irracional
solo para tener un final triste, al menos tienen razones para hacerlas, distrae
un poco, no convencerá a varios pero, por lo menos para mí, es entendible. También
hay un pequeño giro al final que realmente no era necesario pero para ese punto
la parte trágica de la historia esta esencialmente completa así que no molesta
y permite pasar a la moraleja de la historia, y aunque prefiero cuando los
directores evitan simplemente decir la moraleja, aquí no funciona tan mal y se
siente pasión por el mensaje. En conclusión, tal vez no sea un hito, tal vez ni
siquiera es un filme perfecto pero si quieres ver una historia con un punto
interesante, ejecutado maravillosamente y con un mensaje que habla sobre su nación
pero que no le quita universalidad entonces te recomiendo esta trágicamente
brillante historia que es Piedra, Papel o Tijera (El titulo sigue
siendo algo tonto). Mi puntuación final:
