Hay un cierto
grupo de personas en internet que realmente no le gusta analizar el mensaje de
obras que consumen. A pesar de que a muchos les gusta escribir artículos y
hacer videos analizando el significado de su película, serie o videojuego
favorito; siempre hay un grupo que dice que se está sobre-analizando o aun
peor, que creen que se está arruinando la obra al meter cosas como política,
filosofía y comentario social en la conversación. Pero con todo respeto a la
gente que solo le gusta ver series o jugar videojuegos por la emoción del
momento (Después de todo no hay absolutamente nada de malo en eso), la verdad
es que yo tengo una visión distinta en cuanto del arte y el entretenimiento.
Desde mi punto
de vista, toda obra de arte es como un discurso o una conversación. Tienes tu
contenido (Tu moraleja o comentario social); tienes el mensaje, es decir las
palabras que usas que componen el discurso en sí (Esto sería como el guión o
historia) y tienes el medio, que es el modo en que transmites el mensaje o
guion. Tomemos por ejemplo el cine: el cine usa la combinación de
cinematografía, actuación y música para tratar de transmitir emociones, ya que
las emociones son el medio principal. Ya sea una película de acción o un filme
más experimental, los filmes en su mayoría tratan de que te sientes, los mires
y te emociones. Y hay muchos que solo les gusta ver una película, sentir la
emoción (Ya sea tristeza, risa o miedo) y luego seguir con sus vidas sin pensar
mucho en lo que vieron. Y de nuevo, no hay nada de malo en eso, la mayoría de
los filmes se pueden apreciar solo por las emociones que traen: Mad Max: Fury Road es una gran inyección
de adrenalina y The Tree of Life ni
siquiera tiene una narrativa lineal, solo muestra un montón de imágenes para
despertar una reacción sentimental de manera hipnótica. De nuevo, es como una
conversación, y a veces puedes estar hablando con una persona que aprecias y la
conversación puede no ir a ningún lado, pero escuchamos porque nos agrada la
manera de hablar y expresarse de esta persona.
Pero algunos de
nosotros, aunque sabemos y apreciamos el medio como parte vital de la
experiencia, también disfrutamos realmente escuchando y analizando más allá: el
mensaje, lo que la persona o película o videojuego nos está diciendo. Pero
entonces surge una pregunta ¿Qué pasa si la obra no tiene intención de decirnos
nada? ¿Qué tal si el autor no tenía un mensaje claro en mente y estamos leyendo
algo que no está ahí? Bueno, siempre es importante no hacer presunciones sin
realmente conocer al autor, pero a veces un autor puede decir cosas sin darse
cuenta. Volviendo al ejemplo de la conversación ¿Alguna vez te ha pasado o has
encontrado a alguien que le ha pasado que por no pensar dijo algo incomodo o
incluso ofensivo sin querer en una conversación? tal vez no era su intención
pero aun así te sientes mal porque ese mal momento dice algo sobre la persona
que habló. Lo cual nos lleva a una de las reglas no habladas del arte: “Todo lo
que escribes o creas, sea tu intención o no, está diciendo algo sobre ti”. Y
esta regla es muy importante, porque muchas obras son malas cuando el escritor
trata de decir algo pero no tiene cuidado, por lo cual termina diciendo algo realmente
perjudicial para su historia. Como cuando un escritor trata de hacer una
obra sobre un tema delicado como el abuso doméstico y termina diciendo cosas muy ofensivas por no pensar bien, pero ese es un tema para otro día. Y aunque
insisto que no hay nada de malo en consumir obras solo por entretenimiento, mi
punto es que muchas veces podemos estar recibiendo muchos mensajes de nuestra
obras favoritas y ni siquiera darnos cuenta, ya sea porque no estamos
interesados o muchas veces porque no entendemos el contexto de la época y el
lugar en que los autores trabajaron y que pueden decirnos mucho del mensaje,
incluso en obras en las que pensamos solo como diversión.
Por ejemplo, gran
parte de las películas de superhéroes que vienen de Hollywood, posterior al
2001, tratan temas como el uso correcto del poder, el intervencionismo y la
ayuda a nivel internacional porque esos son temas que se volvieron importantes
en Estados Unidos posterior a los ataques terroristas del 11 de Septiembre de
2001, algo en que muchos fuera de ese país no pensamos porque no fue una
tragedia en nuestro respectivo territorio. O consideremos un clásico como Ladrón de Bicicletas, que es una
sencilla historia sobre las dificultados y la pérdida de humanidad que nacen de
la pobreza, pero tiene mucho más peso cuando entiendes que trata de documentar
la pobreza que se vivía en los países de Europa destrozados por la segunda
guerra mundial. Lo que trato de decir es que muchas veces para entender una
obra de arte, debes entender el contexto en que fue hecha. Yo creo que cuando
decimos cosas como ¿Por qué no podemos apagar nuestro cerebro al ver una
película? O ¿Por qué tenemos que meter política en videojuegos? Pienso que
perdemos parte del punto: Estas obras solo a un nivel emocional son fantásticas,
pero la emoción inicial era solo la forma que tenían los autores para hacernos
interesar en el mensaje, en lo que dicen y el contexto en que viven. Y por
respeto a sus obras ¿No es una experiencia más enriquecedora cuando escuchamos
lo que dicen?
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